45 Y los fieles circuncisos que habían venido con Pedro quedaron
atónitos al ver que el don del Espíritu Santo había sido derramado también
sobre los gentiles,
46 pues les oían hablar en lenguas y glorificar a Dios. Entonces Pedro
dijo:
47 «¿Acaso puede alguno negar el agua del bautismo a éstos que han
recibido el Espíritu Santo como nosotros?»
48 Y mandó que fueran bautizados en el nombre de Jesucristo.
Entonces le pidieron que se quedase algunos días.