2 Se encontró con un judío llamado Aquila, originario del Ponto, que
acababa de llegar de Italia, y con su mujer Priscila, por haber
decretado
Claudio que todos los judíos saliesen de Roma; se llegó a ellos
3 y como era del mismo oficio, se quedó a vivir y a trabajar con ellos.
El oficio de ellos era fabricar tiendas.
4 Cada sábado en la sinagoga discutía, y se esforzaba por convencer a
judíos y griegos.
5 Cuando llegaron de Macedonia Silas y Timoteo, Pablo se dedicó
enteramente a la Palabra, dando testimonio ante los judíos de que el Cristo
era Jesús.