18 Al día siguiente Pablo, con todos nosotros, fue a casa de Santiago;
se reunieron también todos los presbíteros.
19 Les saludó y les fue exponiendo una a una todas las cosas que Dios
había obrado entre los gentiles por su ministerio.
20 Ellos, al oírle, glorificaban a Dios. Entonces le dijeron: «Ya
ves,
hermano, cuántos miles y miles de judíos han abrazado la fe, y todos son
celosos partidarios de la Ley.