Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Hechos 21, 27-38

27 Cuando estaban ya para cumplirse los siete días, los judíos venidos
de Asia le vieron en el Templo, revolvieron a todo el pueblo, le
echaron
mano

28 y se pusieron a gritar: «¡Auxilio, hombres de Israel! Este es el
hombre que va enseñando a todos por todas partes contra el pueblo, contra
la Ley y contra este Lugar; y hasta ha llegado a introducir a unos griegos en
el Templo, profanando este Lugar Santo.»

29 Pues habían visto anteriormente con él en la ciudad a Trofimo, de
Éfeso, a quien creían que Pablo había introducido en el Templo.


30 Toda la ciudad se alborotó y la gente concurrió de todas partes. Se
apoderaron de Pablo y lo arrastraron fuera del Templo; inmediatamente
cerraron las puertas.

31 Intentaban darle muerte, cuando subieron a decir al tribuno de la
cohorte: «Toda Jerusalén está revuelta.»

32 Inmediatamente tomó consigo soldados y centuriones y bajó
corriendo hacia ellos; y ellos al ver al tribuno y a los soldados, dejaron de
golpear a Pablo.

33 Entonces el tribuno se acercó, le prendió y mandó que le atasen con
dos cadenas; y empezó a preguntar quién era y qué había hecho.

34 Pero entre la gente unos gritaban una cosa y otros otra. Como no
pudiese sacar nada en claro a causa del alboroto, mandó que le llevasen al
cuartel.

35 Cuando llegó a las escaleras, tuvo que ser llevado a hombros por
los soldados a causa de la violencia de la gente;

36 pues toda la multitud le iba siguiendo y gritando: «¡Mátale!»

37 Cuando iban ya a meterle en el cuartel, Pablo dijo al tribuno: «¿Me
permites decirte una palabra?» El le contestó: «Pero, ¿sabes griego?

38 ¿No eres tú entonces el egipcio que estos últimos días
ha
amotinado y llevado al desierto a los 4.000 terroristas?»