...la Biblia de Jerusalén
Hechos 7, 53-60
53 vosotros que recibisteis la Ley por mediación de ángeles y no la
habéis guardado.»
54 Al oír esto, sus corazones se consumían de rabia y rechinaban sus
dientes contra él.
55 Pero él, lleno del Espíritu Santo, miró fijamente al cielo y vio
la
gloria de Dios y a Jesús que estaba en pie a la diestra de Dios;
56 y dijo: «Estoy viendo los cielos abiertos y al Hijo del hombre que
está en pie a la diestra de Dios.»
57 Entonces, gritando fuertemente, se taparon sus oídos y se
precipitaron todos a una sobre él;
58 le echaron fuera de la ciudad y empezaron a apedrearle. Los
testigos pusieron sus vestidos a los pies de un joven llamado Saulo.
59 Mientras le apedreaban, Esteban hacía esta invocación: «Señor
Jesús, recibe mi espíritu.»
60 Después dobló las rodillas y dijo con fuerte voz: «Señor, no les
tengas en cuenta este pecado.» Y diciendo esto, se durmió.