...la Biblia de Jerusalén
Hechos 7, 56-60
56 y dijo: «Estoy viendo los cielos abiertos y al Hijo del hombre que
está en pie a la diestra de Dios.»
57 Entonces, gritando fuertemente, se taparon sus oídos y se
precipitaron todos a una sobre él;
58 le echaron fuera de la ciudad y empezaron a apedrearle. Los
testigos pusieron sus vestidos a los pies de un joven llamado Saulo.
59 Mientras le apedreaban, Esteban hacía esta invocación: «Señor
Jesús, recibe mi espíritu.»
60 Después dobló las rodillas y dijo con fuerte voz: «Señor, no les
tengas en cuenta este pecado.» Y diciendo esto, se durmió.