8 Será como cuando el hambriento sueña que está comiendo, pero
despierta y tiene el estómago vacío; como cuando el sediento sueña que está
bebiendo, pero se despierta cansado y sediento. Así será la turba de todas
las gentes, que guerrean contra el monte Sión.
9 Idiotizaos y quedad idiotas, cegaos y quedad ciegos; emborrachaos,
pero no de vino, tambaleaos, y no por el licor.
10 Porque ha vertido sobre vosotros Yahveh espíritu de sopor, he
pegado vuestros ojos (profetas) y ha cubierto vuestras cabezas (videntes).
11 Toda revelación será para vosotros como palabras de un libro
sellado, que da uno al que sabe leer diciendo: «Ea, lee eso»; y dice el otro:
«No puedo, porque está sellado»;
12 y luego pone el libro frente a quien no sabe leer, diciendo: «Ea, lee
eso»; y dice éste: «No sé leer»
13 Dice el Señor: Por cuanto ese pueblo se me ha allegado con su
boca, y me han honrado con sus labios, mientras que su corazón está lejos
de mí, y el temor que me tiene son preceptos enseñados por hombres,
14 por eso he aquí que yo sigo haciendo maravillas con ese pueblo,
haciendo portentosas maravillas; perderé la sabiduría de sus sabios, y
eclipsaré el entendimiento de sus entendidos.
15 Ay de los que se esconden de Yahveh para ocultar sus planes, y
ejecutan sus obras en las tinieblas, y dicen: «¿Quién nos ve, quién
nos
conoce?»