8 Porque es día de venganza para Yahveh, año de desquite del
defensor de Sión.
9 Se convertirán sus torrentes en pez, su polvo en azufre, y se hará su
tierra pez ardiente.
10 Ni de noche ni de día se apagará, por siempre subirá el humo de
ella. De generación en generación quedará arruinada, y nunca jamás habrá
quien pase por ella.
11 La heredarán el pelícano y el erizo, el ibis y el cuervo residirán en
ella. Tenderá Yahveh sobre ella la plomada del caos y el nivel del vacío.
12 Los sátiros habitarán en ella, ya no habrá en ella nobles que
proclamen la realeza, y todos sus príncipes serán aniquilados.
13 En sus alcázares crecerán espinos, ortigas y cardos en
sus
fortalezas; será morada de chacales y dominio de avestruces.