...la Biblia de Jerusalén
Isaías 38, 15-20
15 ¿Qué diré? ¿De qué le hablaré, cuando él mismo lo ha hecho?
Caminaré todos mis años en la amargura de mi alma.
16 El Señor está con ellos, viven y todo lo que hay en ellos es vida de
su espíritu. Tú me curarás, me darás la vida.
17 Entonces mi amargura se trocará en bienestar, pues tú preservaste
mi alma de la fosa de la nada, porque te echaste a la espalda
todos mis
pecados.
18 Que el Seol no te alaba ni la Muerte te glorifica, ni los que bajan al
pozo esperan en tu fidelidad.
19 El que vive, el que vive, ése te alaba, como yo ahora. El padre
enseña a los hijos tu fidelidad.
20 Yahveh, sálvame, y mis canciones cantaremos todos los días de
nuestra vida junto a la Casa de Yahveh.