3 porque a derecha e izquierda te expandirás, tu prole heredará
naciones y ciudades desoladas poblarán.
4 No temas, que no te avergonzarás, ni te sonrojes, que no quedarás
confundida, pues la vergüenza de tu mocedad olvidarás, y la afrenta de tu
viudez no recordarás jamás.
5 Porque tu esposo es tu Hacedor, Yahveh Sebaot es su nombre; y el
que te rescata, el Santo de Israel, Dios de toda la tierra se llama.
6 Porque como a mujer abandonada y de contristado espíritu, te llamó
Yahveh; y la mujer de la juventud ¿es repudiada? - dice tu Dios.