8 Ha jurado Yahveh por su diestra y por su fuerte brazo: «No daré tu
grano jamás por manjar a tus enemigos. No beberán hijos de extraños
tu
mosto por el que te fatigaste,
9 sino que los que lo cosechen lo comerán y alabarán a Yahveh, y los
que los recolecten lo beberán en mis atrios sagrados.»
10 ¡Pasad, pasad por las puertas! ¡Abrid camino al pueblo! ¡Reparad,
reparad el camino, y limpiadlo de piedras! ¡Izad pendón hacia los pueblos!