11 «Pide para ti una señal de Yahveh tu Dios en lo profundo del seol o
en lo más alto.»
12 Dijo Ajaz: «No la pediré, no tentaré a Yahveh.»
13 Dijo Isaías: «Oíd, pues, casa de David: ¿Os parece poco cansar a
los hombres, que cansáis también a mi Dios?
14 Pues bien, el Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una
doncella está encinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por
nombre
Emmanuel.
15 Cuajada y miel comerá hasta que sepa rehusar lo malo y elegir lo
bueno.
16 Porque antes que sepa el niño rehusar lo malo y elegir lo bueno,
será abandonado el territorio cuyos dos reyes te dan miedo.
17 Yahveh atraerá sobre ti y sobre tu pueblo y sobre la casa de tu
padre, días cuales no los hubo desde aquel en que se apartó Efraím de Judá
(el rey de Asur).