2 Levántate y baja a la alfarería, que allí mismo te haré oír mis
palabras.
3 Bajé a la alfarería, y he aquí que el alfarero estaba haciendo un
trabajo al torno.
4 El cacharro que estaba haciendo se estropeó como barro en manos
del alfarero, y éste volvió a empezar, trasformándolo en otro cacharro
diferente, como mejor le pareció al alfarero.
5 Entonces me fue dirigida la palabra de Yahveh en estos términos: