5 diciendo: Ea, volveos cada cual de su mal camino y de sus malas
acciones, y volveréis al solar que os dio Yahveh a vosotros y a
vuestros
padres, desde siempre hasta siempre.
6 (No vayáis en pos de otros dioses para servirles y adorarles, no me
provoquéis con las hechuras de vuestras manos, y no os haré mal.)
7 Pero no me habéis oído (- oráculo de Yahveh - de suerte que con las
hechuras de vuestras manos me provocasteis, para vuestro mal).
8 Por eso, así dice Yahveh Sebaot: Puesto que no habéis oído mis
palabras,
9 he aquí que yo mando a buscar a todos los linajes del norte (-
oráculo de Yahveh - y a mi siervo Nabucodonosor, rey de Babilonia), y los
traeré contra esta tierra y contra sus moradores (y contra todas estas gentes
de alrededor); los anatematizaré y los pondré por pasmo, rechifla y ruinas
eternos,
10 y haré desaparecer de ellos voz de gozo y voz de alegría, la voz del
novio y la voz de la novia, el ruido de la muela y la luz de la candela.
11 Será reducida toda esta tierra a pura desolación, y servirán estas
gentes al rey de Babilonia setenta años.
12 (Luego, en cumpliéndose los setenta años, visitaré al rey de
Babilonia y a dicha gente por su delito - oráculo de Yahveh - y a la tierra de
los caldeos trocándola en ruinas eternas).