13 Estás desahuciado; para una herida hay cura, para ti no hay
remedio.
14 Todos tus amantes te olvidaron, por tu salud no preguntaron.
Porque con herida de enemigo te herí, castigo de hombre cruel, (por tu gran
culpa, porque son enormes tus pecados).
15 ¿Por qué te quejas de tu quebranto? Irremediable es tu sufrimiento;
por tu gran culpa, por ser enormes tus pecados te he hecho esto.
16 No obstante todos los que te devoran serán devorados, y todos tus
opresores, todos ellos, irán al cautiverio; serán tus despojadores despojados,
y a todos tus saqueadores los entregaré al saqueo.
17 Sí; haré que tengas alivio, de tus llagas te curaré - oráculo de
Yahveh -. Porque «La Repudiada» te llamaron. «Sión de la que nadie
se
preocupa».
18 Así dice Yahveh: He aquí que yo hago volver a los cautivos de las
tiendas de Jacob y de sus mansiones me apiadaré; será reedificada la ciudad
sobre su montículo de ruinas y el alcázar tal como era será restablecido.
19 Y saldrá de entre ellos loor y voz de gente alegre; los multiplicaré y
no serán pocos, los honraré y no serán menguados,
20 sino que serán sus hijos como antes, su comunidad ante mí estará
en pie, y yo visitaré a todos sus opresores.
21 Será su soberano uno de ellos, su jefe de entre ellos saldrá, y
le
haré acercarse y él llegará hasta mí, porque ¿quién es el que se jugaría la
vida por llegarse hasta mí? - oráculo de Yahveh -.