...la Biblia de Jerusalén
Job 14, 10-15
10 Pero el hombre que muere queda inerte, cuando un humano expira,
¿dónde está?
11 Podrán agotarse las aguas del mar, sumirse los ríos y secarse,
12 que el hombre que yace no se levantará, se gastarán los cielos antes
que se despierte, antes que surja de su sueño.
13 ¡Ojalá en el seol tú me guardaras, me escondieras allí mientras pasa
tu cólera, y una tregua me dieras, para acordarte de mí luego
14 - pues, muerto el hombre, ¿puede revivir? - todos los días de mi
milicia esperaría, hasta que llegara mi relevo!
15 Me llamarías y te respondería; reclamarías la obra de tus manos.