...la Biblia de Jerusalén
Job 17, 5-10
5 Como el que anuncia a sus amigos un reparto, cuando languidecen
los ojos de sus hijos,
6 me he hecho yo proverbio de las gentes, alguien a quien escupen en
la cara.
7 Mis ojos se apagan de pesar, mis miembros se desvanecen como
sombra.
8 Los hombres rectos quedan de ello asombrados, contra el impío se
indigna el inocente;
9 el justo se afianza en su camino, y el de manos puras redobla su
energía.
10 Pero, vosotros todos, volved otra vez, ¡no hallaré un solo sabio
entre vosotros!