...la Biblia de Jerusalén
Job 24, 23-25
23 Le dejaba apoyarse con seguridad, pero sus ojos vigilaban sus
caminos.
24 Se encumbró por un instante, y ya no existe, se abate como el
armuelle que se corta, como la cresta de la espiga se amustia.
25 ¿No es así? ¿quién me puede desmentir y reducir a nada mi
palabra?