Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Job 29, 11-20

11 Oído que lo oía me llamaba feliz, ojo que lo veía se hacía mi
testigo.

12 Pues yo libraba al pobre que clamaba, y al huérfano que no tenía
valedor.


13 La bendición del moribundo subía hacia mí, el corazón de la viuda
yo alegraba.

14 Me había puesto la justicia, y ella me revestía, como manto y
turbante, mi derecho.

15 Era yo los ojos del ciego y del cojo los pies.

16 Era el padre de los pobres, la causa del desconocido examinaba.

17 Quebraba los colmillos del inicuo, de entre sus dientes arrancaba su
presa.

18 Y me decía: «Anciano moriré, como la arena aumentaré mis días.
19 Mi raíz está franca a las aguas, el rocío se posa de noche en
mi

ramaje.

20 Mi gloria será siempre nueva en mí, y en mi mano mi arco
renovará su fuerza.