...la Biblia de Jerusalén
Job 29, 17-23
17 Quebraba los colmillos del inicuo, de entre sus dientes arrancaba su
presa.
18 Y me decía: «Anciano moriré, como la arena aumentaré mis días.
19 Mi raíz está franca a las aguas, el rocío se posa de noche en
mi
ramaje.
20 Mi gloria será siempre nueva en mí, y en mi mano mi arco
renovará su fuerza.
21 Me escuchaban ellos con expectación, callaban para oír mi consejo.
22 Después de hablar yo, no replicaban, y sobre ellos mi palabra caía
gota a gota.
23 Me esperaban lo mismo que a la lluvia, abrían su boca como a
lluvia tardía.