...la Biblia de Jerusalén
Job 33, 18-31
18 para librar su alma de la fosa y su vida de pasar el Canal.
19 También es corregido por el dolor en su camilla, por el temblor
continuo de sus huesos,
20 cuando a su vida el alimento asquea y a su alma los manjares
exquisitos,
21 cuando su carne desaparece de la vista, y sus huesos, que no se
veían, aparecen;
22 cuando su alma a la fosa se aproxima y su vida a la morada de los
muertos.
23 Si hay entonces junto a él un Ángel, un Mediador escogido entre
mil, que declare al hombre su deber,
24 que de él se apiade y diga: «Líbrale de bajar a la fosa, yo he
encontrado el rescate de su alma»,
25 su carne se renueva de vigor juvenil, vuelve a los días de su
adolescencia.
26 Invoca a Dios, que le otorga su favor, y va a ver con júbilo
su
rostro Anuncia a los demás su justicia,
27 canta así entre los hombres: «Yo había pecado y torcido el derecho,
mas Dios no me ha dado el merecido.
28 Ha librado mi alma de pasar por la fosa, y mi vida contempla
la
luz.»
29 He aquí todo lo que hace Dios, dos y tres veces con el hombre,
30 para recobrar su alma de la fosa, para que sea alumbrado con la luz
de los vivos.
31 Atiende, Job, escúchame, guarda silencio, y yo hablaré.