...la Biblia de Jerusalén
Job 36, 4-17
4 En verdad, no son mentira mis palabras, un maestro en saber está
contigo.
5 Dios no rechaza al hombre íntegro,
6 ni deja vivir al malvado en plena fuerza. Hace justicia a los pobres,
7 y no quita al justo su derecho. El puso a los reyes en el trono, para
siempre los asienta, mas se engríen,
8 y él los amarra con cadenas, y quedan presos en los lazos de la
angustia.
9 Entonces les pone su obra al descubierto y sus culpas nacidas del
orgullo.
10 A sus oídos pronuncia una advertencia, y manda que se vuelvan de
la iniquidad.
11 Si escuchan y son dóciles, acaban sus días en ventura y en delicias
sus años.
12 Si no escuchan, pasan el Canal, y expiran por falta de cordura.
13 Y los obstinados que imponen la cólera y no piden auxilio cuando
él los encadena,
abre.
14 mueren en plena juventud, y su vida en la edad juvenil.
15 El salva al pobre por su misma pobreza, por la miseria el oído le
16 También a ti te arrancará de las fauces de la angustia. Antes
gozabas de abundancia sin límites, la grasa desbordaba de tu mesa.
17 Mas no hacías justicia de los malos, defraudabas el derecho del
huérfano.