Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Job 4, 16-21

16 Alguien surge... no puedo reconocer su cara; una imagen delante de
mis ojos. Silencio..., después oigo una voz:

17 «¿Es justo ante Dios algún mortal? ¿ante su Hacedor es puro un
hombre?

18 Si no se fía de sus mismos servidores, y aun a sus ángeles achaca
desvarío,

19 ¡cuánto más a los que habitan estas casas de arcilla, ellas mismas
hincadas en el polvo! Se les aplasta como a una polilla;

20 de la noche a la mañana quedan pulverizados. Para siempre
perecen sin advertirlo nadie;

21 se les arranca la cuerda de su tienda, y mueren privados de
sabiduría.»