22 Al adivino Balaam, hijo de Beor, los israelitas lo habían pasado a
cuchillo con otras víctimas.
23 Así el territorio de los rubenitas llegaba hasta el Jordán. Esta fue la
heredad de los hijos de Rubén por clanes: las ciudades y sus aldeas.
24 A la tribu de Gad, a los hijos de Gad, había dado Moisés una parte
conforme a sus clanes.
25 Su territorio fue Yazer, todas las ciudades de Galaad, la mitad del
país de los ammonitas hasta Aroer, que está enfrente de Rabbá,
26 y desde Jesbón hasta Ramat Hammispá y Betonim, y desde
Majanáyim hasta el territorio de Lo Debar;
27 y en el valle: Bet Jaram, Bet Nimrá, Sukkot, Safón - el resto del
reino de Sijón, rey de Jesbón -, el Jordán y el territorio hasta la punta del
mar de Kinnéret, al lado oriental del Jordán.
28 Esta fue la heredad de los hijos de Gad por clanes: las ciudades y
sus aldeas.
29 A la media tribu de Manasés le había dado Moisés una parte
conforme a sus clanes.
30 Su territorio comprendía, desde Majanáyim, todo el Basán, todos
los Aduares de Yaír en Basán: sesenta ciudades;
31 la mitad de Galaad, Astarot y Edreí, ciudades del reino de Og en
Basán. Pasaron a ser de los hijos de Makir, hijo de Manasés, de la mitad de
los hijos de Makir por clanes.