8 La otra media tribu de Manasés, junto con los rubenitas y los
gaditas, había recibido ya la parte de la heredad que Moisés les había dado
al lado oriental del Jordán, como Moisés, siervo de Yahveh, les había dado:
9 la tierra desde Aroer, que está a orillas del torrente Arnón, y
la
ciudad que está en medio de la vaguada: y toda la llanura desde
Medbá
hasta Dibón;
10 todas las ciudades de Sijón, rey de los amorreos, que había reinado
en Jesbón, hasta la frontera de los ammonitas.
11 Además, Galaad y el territorio de los guesuritas y los maakatitas
con toda la montaña del Hermón y todo Basán hasta Salká;
12 y dentro de Basán todo el reino de Og, que había reinado en
Astarot y en Edreí, y era último residuo de los Refaím. Moisés los
había
batido y desposeído.
13 Pero los israelitas no desposeyeron ni a los guesuritas ni a los
maakatitas, de manera que Guesur y Maaká siguen todavía hoy habitando
en medio de Israel.
14 La tribu de Leví fue la única a la que no se dio heredad: Yahveh,
Dios de Israel, fue su heredad, como se lo había dicho.
15 Moisés había dado a la tribu de los hijos de Rubén una parte por
clanes.
16 Su territorio fue desde Aroer, que está a orillas del torrente Arnón,
incluida la ciudad que está en medio de la vaguada, y todo el
llano hasta
Medbá;
17 Jesbón con todas las ciudades situadas en el llano: Dibón, Bamot,
Baal, Bet Baal Meón,
18 Yahás, Quedemot, Mefaat,
19 Quiryatáyim, Sibmá, y Seret Hassajar, en el monte del valle;
20 Bet Peor, las laderas del Pisgá, Bet Hayesimot,