2 Se le dijo al rey de Jericó: «Mira que unos hombres israelitas han
entrado aquí por la noche para explorar el país.»
3 Entonces el rey de Jericó mandó decir a Rajab: «Haz salir a los
hombres que han entrado donde ti - que han entrado a tu casa - porque han
venido para explorar todo el país.»
4 Pero la mujer tomó a los dos hombres y los escondió. Luego
respondió: «Es verdad que esos hombres han venido a mi casa, pero yo no
sabía de dónde eran.
5 Cuando se iba a cerrar la puerta por la noche, esos hombres salieron
y no sé adónde han ido. Perseguidles aprisa, que los alcanzaréis.»
6 Pero ella los había hecho subir al terrado y los había escondido entre
unos haces de lino que tenía amontonados en el terrado.
7 Salieron algunos hombres en su persecución camino del Jordán,
hacia los vados, y se cerró la puerta en cuanto los perseguidores
salieron
tras ellos.
8 Todavía ellos no se habían acostado cuando Rajab subió al terrado,
donde ellos