Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Jueces 15, 4-20

4 Se fue Sansón, y cazó trescientas zorras; cogió unas teas y, juntando
a los animales cola con cola, puso una tea en medio entre las dos colas.

5 Prendió fuego a las teas y luego, soltando las zorras por las mieses
de los filisteos, incendió las gavillas y el trigo todavía en pie y
hasta las
viñas y olivares.

6 Los filisteos preguntaron: «¿Quién ha hecho esto?» Y les
respondieron: «Sansón, el yerno del timnita, porque éste tomó a su mujer y
se la dio a su compañero.» Entonces los filisteos subieron y
quemaron a
aquella mujer y la casa de su padre.

7 Sansón les dijo: «Ya que os portáis así no he de parar hasta
vengarme de vosotros.»

8 Y les midió las costillas causándoles un gran estrago. Después bajó
a la gruta de la roca de Etam y se quedó allí.

9 Los filisteos subieron a acampar en Judá e hicieron una incursión
por Lejí.

10 Y les dijeron los hombres de Judá: «¿Por qué habéis subido contra
nosotros?» Respondieron: «Hemos subido para amarrar a Sansón, para
hacer con él lo que él ha hecho con nosotros.»

11 3.000 hombres de Judá bajaron a la gruta de la roca de Etam y
dijeron a Sansón: «¿No sabes que los filisteos nos están dominando? ¿Qué


nos has hecho?» El les respondió: «Como me trataron a mí, les he tratado
yo a ellos.»

12 Ellos le dijeron: «Hemos bajado para amarrarte y entregarte en
manos de los filisteos.» Sansón les dijo: «Juradme que no me vais a matar
vosotros mismos.»

13 Le respondieron: «No; sólo queremos amarrarte y entregarte, no te
mataremos.» Lo amarraron, pues, con dos cordeles nuevos y lo sacaron de
entre las rocas.

14 Cuando llegaba a Lejí y los filisteos corrían a su encuentro, con
gritos de triunfo, el espíritu de Yahveh vino sobre él: los cordeles
que
sujetaban sus brazos fueron como hilos de lino que se queman al fuego y las
ligaduras se deshicieron entre sus manos.

15 Encontró una quijada de asno todavía fresca, alargó la mano, la
cogió y mató con ella a mil hombres.

16 Sansón dijo entonces: «Con quijada de asno los amontoné. Con
quijada de asno, a mil hombres sacudí.»

17 Cuando terminó de hablar, tiró la quijada: por eso se llamó aquel
lugar Ramat Lejí.

18 Entonces sintió una sed terrible e invocó a Yahveh diciendo: «Tú
has logrado esta gran victoria por mano de tu siervo y ahora ¿voy a morir de
sed y a caer en manos de los incircuncisos?»

19 Entonces Dios hendió la cavidad que hay en Lejí y brotó agua de
ella. Sansón bebió, recobró su espíritu y se reanimó. Por eso se
dio el
nombre de En Haccoré a la fuente que existe todavía hoy en Lejí.

20 Sansón fue juez en Israel en la época de los filisteos por espacio de
veinte años.


ella.