2 Dijo a su madre: «Los 1.100 siclos de plata que te quitaron y por los
que lanzaste una maldición, incluso oí que dijiste... esa plata la tengo yo;
yo la robé.» Su madre respondió: «Que mi hijo sea bendito de Yahveh».
3 Y él le devolvió los 1.100 siclos de plata. Y su madre dijo: «Yo
consagré solemne y espontáneamente, por mi hijo, esta plata a Yahveh, para
hacer con ella una imagen y un ídolo de fundición, pero ahora te la
devuelvo.» Y él devolvió la plata a su madre.