9 Le enterraron en el término de su heredad, en Timnat Jeres, en
la
montaña de Efraím, al norte del monte Gaás.
10 También aquella generación fue a reunirse con sus padres y les
sucedió otra generación que no conocía a Yahveh ni lo que había hecho por
Israel.
11 Entonces los hijos de Israel hicieron lo que desagradaba a Yahveh
y sirvieron a los Baales.
12 Abandonaron a Yahveh, el Dios de sus padres, que los había
sacado de la tierra de Egipto, y siguieron a otros dioses de los pueblos de
alrededor; se postraron ante ellos, irritaron a Yahveh;
13 dejaron a Yahveh y sirvieron a Baal y a las Astartés.
14 Entonces se encendió la ira de Yahveh contra Israel. Los puso en
manos de salteadores que los despojaron, los dejó vendidos en manos de
los enemigos de alrededor y no pudieron ya sostenerse ante sus enemigos.
15 En todas sus campañas la mano de Yahveh intervenía contra ellos
para hacerles daño, como Yahveh se lo tenía dicho y jurado. Los puso así
en gran aprieto.
16 Entonces Yahveh suscitó jueces que los salvaron de la mano de los
que los saqueaban.