Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Jueces 9, 15-39

15 La zarza respondió a los árboles: “Si con sinceridad venís a
ungirme a mí para reinar sobre vosotros, llegad y cobijaos a mi sombra. Y
si no es así, brote fuego de la zarza y devore los cedros del Líbano.”»

16 «Ahora pues, ¿habéis obrado con sinceridad y lealtad al elegir rey a
Abimélek? ¿Os habéis portado bien con Yerubbaal y su casa y le
habéis
tratado según el mérito de sus manos?

17 Mi padre combatió por vosotros, arriesgó su vida, os libró de la
mano de Madián;

18 y vosotros os habéis alzado hoy contra la casa de mi padre, habéis
matado a sus hijos, setenta hombres sobre una misma piedra, y
habéis
puesto por rey a Abimélek, el hijo de su esclava, sobre los señores
de
Siquem, por ser él vuestro hermano.

19 Si, pues, habéis obrado con sinceridad y lealtad con Yerubbaal y
con su casa en el día de hoy, que Abimélek sea vuestra alegría y vosotros la
suya.

20 De lo contrario, que salga fuego de Abimélek y devore a los
señores de Siquem y de Bet Milló; y que salga fuego de los
señores de
Siquem y Bet Milló y devore a Abimélek.»

21 Y Jotam huyó, se puso a salvo y fue a Beer, donde se estableció,
lejos del alcance de su hermano Abimélek.

22 Abimélek gobernó tres años en Israel.

23 Pero Dios envió un espíritu de discordia entre Abimélek y los
señores de Siquem; y los señores de Siquem traicionaron a Abimélek,

24 para que el crimen cometido contra los setenta hijos de Yerubbaal
fuera vengado y su sangre cayera sobre su hermano Abimélek, que los
había asesinado, y sobre los señores de Siquem, que le habían
ayudado a
asesinar a sus hermanos.

25 Los señores de Siquem prepararon contra él emboscadas en las
cimas de los montes y saqueaban a todo el que pasaba cerca por el camino.
Y se dio aviso a Abimélek.

26 Gaal, hijo de Obed, acompañando a sus hermanos, vino a pasar por
Siquem y se ganó la confianza de los señores de Siquem.


27 Salieron éstos al campo a vendimiar sus viñas, pisaron las uvas,
hicieron fiesta y entraron en el templo de su dios. Comieron y bebieron y
maldijeron a Abimélek.

28 Entonces Gaal, hijo de Obed, exclamó: «¿Quién es Abimélek y qué
es Siquem para que le sirvamos? ¿por qué el hijo de Yerubbaal y Zebul, su
lugarteniente, no han de servir a la gente de Jamor, padre de Siquem? ¿Por
qué hemos de servirles nosotros?

29 ¡Quién pusiera este pueblo en mis manos! Yo echaría a Abimélek y
le diría: Refuerza tu ejército y sal a la lucha.»

30 Zebul, gobernador de la ciudad, se enteró de la propuesta de Gaal,
hijo de Obed, y montó en cólera.

31 Envió secretamente mensajeros donde Abimélek, para decirle:

«Mira que Gaal, hijo de Obed, con sus hermanos, ha llegado a Siquem
y
están soliviantando a la ciudad contra ti.

32 Por tanto, levántate de noche, tú y la gente que tienes contigo,
y
tiende una emboscada en el campo;

33 por la mañana temprano, en cuanto salga el sol, te levantas y te
lanzas contra la ciudad. Cuando Gaal salga a tu encuentro con su
gente,
harás con él lo que te venga a mano.»

34 Abimélek se levantó de noche con todas las tropas de que disponía
y tendieron una emboscada frente a Siquem, repartidos en cuatro grupos.

35 Cuando Gaal, hijo de Obed, salió y se detuvo a la entrada de la
puerta de la ciudad, Abimélek y la tropa que le acompañaba salieron de su
emboscada.

36 Gaal vio la tropa y dijo a Zebul: «Mira la gente que baja de
las
cumbres de los montes.» Zebul respondió: «Es la sombra de los montes lo
que ves y te parecen hombres.»

37 Gaal volvió a decir: «Mirad la gente que baja del lado del Ombligo
de la Tierra, y otra partida llega por el camino de la Encina de
los
Adivinos.»

38 Zebul le dijo entonces: «¿Qué has hecho de tu boca tú que decías:
“¿Quién es Abimélek para que le sirvamos?” ¿ No es esa la gente que
despreciaste? Sal, pues, ahora y pelea contra ellos.»

39 Gaal salió al frente de los señores de Siquem y presentó batalla a
Abimélek.