4 Todo lecho en que duerma el que padece flujo será impuro y todo
asiento en que se siente será impuro.
5 Quien toque su lecho lavará sus vestidos, se bañará en agua y
quedará impuro hasta la tarde.
6 Quien se siente sobre un mueble donde se haya sentado cualquiera
que padece flujo lavará sus vestidos, se bañará en agua y será impuro hasta
la tarde.
7 Quien toque el cuerpo del que padece flujo lavará sus vestidos, se
bañará en agua y será impuro hasta la tarde.
8 Si el que tiene flujo escupe sobre un hombre puro, éste lavará sus
vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde.
9 Todo aparejo sobre el cual haya montado el que padece flujo será
inmundo.
10 Quien toque un objeto que haya estado debajo de él quedará
impuro hasta la tarde. Y el que los lleve lavará sus vestidos, se bañará en
agua y será impuro hasta la tarde.
11 Todo aquel a quien toque el que padece flujo sin haberse lavado las
manos con agua lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará
impuro
hasta la tarde.
12 Toda vasija de barro tocada por el que padece flujo será rota, y
todo utensilio de madera será lavado con agua.
13 Si el que padece flujo sana de él, se contarán siete días para
su
purificación; después lavará sus vestidos, se bañará en agua viva y quedará
puro.
14 Al día octavo tomará dos tórtolas o dos pichones y se presentará
ante Yahveh a la entrada de la Tienda del Encuentro, para
entregarlos al
sacerdote.
15 El sacerdote los ofrecerá, uno como sacrificio por el pecado, el otro
como holocausto, y de esta manera el sacerdote hará expiación por él ante
Yahveh, a causa de su flujo.