23 No te unirás con bestia haciéndote impuro por ella. La mujer no se
pondrá ante una bestia para unirse con ella; es una infamia.
24 No os hagáis impuros con ninguna de estas acciones, pues con ellas
se han hecho impuras las naciones que yo voy a arrojar ante vosotros.
25 Se ha hecho impuro el país; por eso he castigado su iniquidad, y el
país ha vomitado a sus habitantes.
26 Vosotros, pues, guardad mis preceptos y mis normas, y nos
cometáis ninguna de estas abominaciones, ni los de vuestro pueblo ni
los
forasteros que residen entre vosotros.