Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Levítico 27, 27-34

27 Si se trata de un animal impuro, y lo quiere rescatar según la
tasación, añadirá la quinta parte al precio; pero si no es
rescatado, será
vendido, conforme a la tasación.

28 Nada de lo que a uno pertenece - hombre, animal o campo de su
propiedad - que haya sido consagrado a Yahveh con anatema podrá
venderse ni rescatarse. Todo anatema es cosa sacratísima para Yahveh.

29 Ningún ser humano consagrado como anatema podrá ser rescatado;
deberá morir.

30 El diezmo entero de la tierra, tanto de las semillas de la tierra como
de los frutos de los árboles, es de Yahveh; es cosa sagrada de Yahveh.

31 Si alguno quiere rescatar parte de su diezmo, añadirá la quinta parte
de su valor.

32 Todo diezmo de ganado mayor o menor, es decir, cada décima
cabeza que pasa bajo el cayado, será cosa sagrada de Yahveh.

33 No se escogerá entre animal bueno o malo, ni se le puede sustituir;
y si se hace cambio, tanto el animal permutado como su sustituto
serán
cosas sagradas; no podrán ser rescatados.

34 Estos son los mandamientos que Yahveh encomendó a Moisés para
los hijos de Israel en el monte Sinaí.