Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Lucas 12, 30-38

30 Que por todas esas cosas se afanan los gentiles del mundo; y ya
sabe vuestro Padre que tenéis la necesidad de eso.

31 Buscad más bien su Reino, y esas cosas se os darán por añadidura.
32 «No temas, pequeño rebaño, porque a vuestro Padre le ha parecido

bien daros a vosotros el Reino.

33 «Vended vuestros bienes y dad limosna. Haceos bolsas que no se
deterioran, un tesoro inagotable en los cielos, donde no llega el ladrón, ni la
polilla;

34 porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro
corazón.

35 «Estén ceñidos vuestros lomos y las lámparas encendidas,

36 y sed como hombres que esperan a que su señor vuelva de la boda,
para que, en cuanto llegue y llame, al instante le abran.

37 Dichosos los siervos, que el señor al venir encuentre despiertos: yo
os aseguro que se ceñirá, los hará ponerse a la mesa y, yendo de uno a otro,
les servirá.

38 Que venga en la segunda vigilia o en la tercera, si los encuentra así,

¡dichosos de ellos!