45 Pero si aquel siervo se dice en su corazón: “Mi señor tarda en
venir”, y se pone a golpear a los criados y a las criadas, a comer y a beber y
a emborracharse,
46 vendrá el señor de aquel siervo el día que no espera y en el
momento que no sabe, le separará y le señalará su suerte entre los infieles.
47 «Aquel siervo que, conociendo la voluntad de su señor, no ha
preparado nada ni ha obrado conforme a su voluntad, recibirá muchos
azotes;