18 Decía, pues: «¿A qué es semejante el Reino de Dios? ¿A qué lo
compararé?
19 Es semejante a un grano de mostaza, que tomó un hombre y lo
puso en su jardín, y creció hasta hacerse árbol, y las aves del cielo anidaron
en sus ramas.»
20 Dijo también: «¿A qué compararé el Reino de Dios?
21 Es semejante a la levadura que tomó una mujer y la metió en tres
medidas de harina, hasta que fermentó todo.»