...la Biblia de Jerusalén
Lucas 17, 23-36
23 Y os dirán: “Vedlo aquí, vedlo allá.” No vayáis, ni corráis detrás.
24 Porque, como relámpago fulgurante que brilla de un extremo a otro
del cielo, así será el Hijo del hombre en su Día.
25 Pero, antes, le es preciso padecer mucho y ser reprobado por esta
generación.
26 «Como sucedió en los días de Noé, así será también en los días del
Hijo del hombre.
27 Comían, bebían, tomaban mujer o marido, hasta el día en que entró
Noé en el arca; vino el diluvio y los hizo perecer a todos.
28 Lo mismo, como sucedió en los días de Lot: comían, bebían,
compraban, vendían, plantaban, construían;
29 pero el día que salió Lot de Sodoma, Dios hizo llover fuego y
azufre del cielo y los hizo perecer a todos.
30 Lo mismo sucederá el Día en que el Hijo del hombre se manifieste.
31 «Aquel Día, el que esté en el terrado y tenga sus enseres en casa,
no baje a recogerlos; y de igual modo, el que esté en el campo,
no se
vuelva atrás.
32 Acordaos de la mujer de Lot.
33 Quien intente guardar su vida, la perderá; y quien la pierda, la
conservará.
34 Yo os lo digo: aquella noche estarán dos en un mismo lecho: uno
será tomado y el otro dejado;
35 habrá dos mujeres moliendo juntas: una será tomada y la otra
dejada.»
36 Y le dijeron: «¿Dónde, Señor?» El les respondió: «Donde esté el
cuerpo, allí también se reunirán los buitres.»