Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Lucas 5, 9-16

9 Pues el asombro se había apoderado de él y de cuantos con él
estaban, a causa de los peces que habían pescado.

10 Y lo mismo de Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran
compañeros de Simón. Jesús dijo a Simón: «No temas. Desde ahora serás
pescador de hombres.»

11 Llevaron a tierra las barcas y, dejándolo todo, le siguieron.

12 Y sucedió que, estando en una ciudad, se presentó un hombre
cubierto de lepra que, al ver a Jesús, se echó rostro en tierra, y
le rogó
diciendo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme.»

13 El extendió la mano, le tocó, y dijo: «Quiero, queda limpio.» Y al
instante le desapareció la lepra.

14 Y él le ordenó que no se lo dijera a nadie. Y añadió: «Vete,
muéstrate al sacerdote y haz la ofrenda por tu purificación como prescribió
Moisés para que les sirva de testimonio.»

15 Su fama se extendía cada vez más y una numerosa multitud afluía
para oírle y ser curados de sus enfermedades.

16 Pero él se retiraba a los lugares solitarios, donde oraba.