6 El hijo honra a su padre, el siervo a su señor. Pues si yo soy padre,
¿dónde está mi honra? Y si señor, ¿dónde mi temor?, dice Yahveh Sebaot a
vosotros sacerdotes que menospreciáis mi Nombre. - Decís: ¿En qué hemos
menospreciado tu Nombre? -
7 Presentando en mi altar pan impuro. - Y decís ahora: ¿En qué te
hemos manchado? - Pensando que la mesa de Yahveh es despreciable.
8 Y cuando presentáis para el sacrificio una res ciega, ¿no está mal? Y
cuando presentáis una coja o enferma, ¿no está mal? Anda, ofrécesela a tu
gobernador: ¿se te pondrá contento o te acogerá con agrado?, dice Yahveh
Sebaot.