Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Marcos 1, 41-44

41 Compadecido de él, extendió su mano, le tocó y le dijo: «Quiero;
queda limpio.»

42 Y al instante, le desapareció la lepra y quedó limpio.
43 Le despidió al instante prohibiéndole severamente:

44 «Mira, no digas nada a nadie, sino vete, muéstrate al sacerdote y
haz por tu purificación la ofrenda que prescribió Moisés para que les sirva
de testimonio.»