Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Marcos 12, 2-21

2 Envió un siervo a los labradores a su debido tiempo para recibir de
ellos una parte de los frutos de la viña.

3 Ellos le agarraron, le golpearon y le despacharon con las manos
vacías.

4 De nuevo les envió a otro siervo; también a éste le descalabraron y
le insultaron.


5 Y envió a otro y a éste le mataron; y también a otros muchos,
hiriendo a unos, matando a otros.

6 Todavía le quedaba un hijo querido; les envió a éste, el último,
diciendo: “A mi hijo le respetarán”.

7 Pero aquellos labradores dijeron entre sí: “Este es el heredero.
Vamos, matémosle, y será nuestra la herencia.”

8 Le agarraron, le mataron y le echaron fuera de la viña.

9 ¿Qué hará el dueño de la viña? Vendrá y dará muerte a los
labradores y entregará la viña a otros.

10 ¿No habéis leído esta Escritura: = La piedra que los constructores
desecharon, en piedra angular se ha convertido; =

11 = fue el Señor quien hizo esto y es maravilloso a nuestros ojos?» =
12 Trataban de detenerle - pero tuvieron miedo a la gente - porque

habían comprendido que la parábola la había dicho por ellos. Y dejándole,
se fueron.

13 Y envían donde él algunos fariseos y herodianos, para cazarle en
alguna palabra.

14 Vienen y le dicen: «Maestro, sabemos que eres veraz y que no te
importa por nadie, porque no miras la condición de las personas, sino que
enseñas con franqueza el camino de Dios: ¿Es lícito pagar tributo al César o
no? ¿Pagamos o dejamos de pagar?»

15 Mas él, dándose cuenta de su hipocresía, les dijo: «¿Por qué me
tentáis? Traedme un denario, que lo vea.»

16 Se lo trajeron y les dice: «¿De quién es esta imagen
y la
inscripción?» Ellos le dijeron: «Del César.»

17 Jesús les dijo: «Lo del César, devolvédselo al César, y lo de Dios, a
Dios.» Y se maravillaban de él.

18 Se le acercan unos saduceos, esos que niegan que haya
resurrección, y le preguntaban:

19 «Maestro, Moisés nos dejó escrito que si muere el hermano de
alguno y deja mujer y no deja hijos, que su hermano tome a la mujer para
dar descendencia a su hermano.

20 Eran siete hermanos: el primero tomó mujer, pero murió sin dejar
descendencia;

21 también el segundo la tomó y murió sin dejar descendencia; y el
tercero lo mismo.