Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Marcos 7, 30-37

30 Volvió a su casa y encontró que la niña estaba echada en la cama y
que el demonio se había ido.

31 Se marchó de la región de Tiro y vino de nuevo, por Sidón, al mar
de Galilea, atravesando la Decápolis.

32 Le presentan un sordo que, además, hablaba con dificultad, y le
ruegan imponga la mano sobre él.

33 El, apartándole de la gente, a solas, le metió sus dedos en los oídos
y con su saliva le tocó la lengua.

34 Y, levantando los ojos al cielo, dio un gemido, y le dijo: =

«Effatá», que quiere decir: «¡Abrete!»

35 Se abrieron sus oídos y, al instante, se soltó la atadura de su lengua
y hablaba correctamente.

36 Jesús les mandó que a nadie se lo contaran. Pero cuanto más se lo
prohibía, tanto más ellos lo publicaban.

37 Y se maravillaban sobremanera y decían «Todo lo ha hecho bien;
hace oír a los sordos y hablar a los mudos.»