29 Les dijo: «Esta clase con nada puede ser arrojada sino con la
oración.»
30 Y saliendo de allí, iban caminando por Galilea; él no quería que se
supiera,
31 porque iba enseñando a sus discípulos. Les decía: «El Hijo del
hombre será entregado en manos de los hombres; le matarán y a los tres
días de haber muerto resucitará.»
32 Pero ellos no entendían lo que les decía y temían preguntarle.
33 Llegaron a Cafarnaúm, y una vez en casa, les preguntaba: «¿De
qué discutíais por el camino?»
34 Ellos callaron, pues por el camino habían discutido entre sí quién
era el mayor.
35 Entonces se sentó, llamó a los Doce, y les dijo: «Si uno quiere ser
el primero, sea el último de todos y el servidor de todos.»