Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Mateo 12, 13-24

13 Entonces dice al hombre: «Extiende tu mano.» El la extendió, y
quedó restablecida, sana como la otra.

14 Pero los fariseos, en cuanto salieron, se confabularon contra él para
ver cómo eliminarle.

15 Jesús, al saberlo, se retiró de allí. Le siguieron muchos y los curó a
todos.

16 Y les mandó enérgicamente que no le descubrieran;
17 para que se cumpliera el oráculo del profeta Isaías:

18 = He aquí mi Siervo, a quien elegí, mi Amado, en quien mi alma se
complace. Pondré mi Espíritu sobre él, y anunciará el juicio a las naciones.

=

19 = No disputará ni gritará, ni oirá nadie en las plazas su voz. =

20 = La caña cascada no la quebrará, ni apagará la mecha humeante,
hasta que lleve a la victoria el juicio: =

21 = en su nombre pondrán las naciones su esperanza. =

22 Entonces le fue presentado un endemoniado ciego y mudo. Y le
curó, de suerte que el mudo hablaba y veía.

23 Y toda la gente atónita decía: «¿No será éste el Hijo de David?»

24 Mas los fariseos, al oírlo, dijeron: «Este no expulsa los demonios
más que por Beelzebul, Príncipe de los demonios.»