50 y los echarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el rechinar
de dientes.
51 «¿Habéis entendido todo esto?» Dícenle: «Sí.»
52 Y él les dijo: «Así, todo escriba que se ha hecho discípulo del
Reino de los Cielos es semejante al dueño de una casa que saca de sus arcas
lo nuevo y lo viejo.»