...la Biblia de Jerusalén
Mateo 25, 2-18
2 Cinco de ellas eran necias, y cinco prudentes.
3 Las necias, en efecto, al tomar sus lámparas, no se proveyeron de
aceite;
4 las prudentes, en cambio, junto con sus lámparas tomaron aceite en
las alcuzas.
5 Como el novio tardara, se adormilaron todas y se durmieron.
6 Mas a media noche se oyó un grito: “¡Ya está aquí el novio! ¡Salid a
su encuentro!”
7 Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y arreglaron sus
lámparas.
8 Y las necias dijeron a las prudentes: “Dadnos de vuestro aceite, que
nuestras lámparas se apagan.”
9 Pero las prudentes replicaron: “No, no sea que no alcance para
nosotras y para vosotras; es mejor que vayáis donde los vendedores y os lo
compréis.”
10 Mientras iban a comprarlo, llegó el novio, y las que estaban
preparadas entraron con él al banquete de boda, y se cerró la puerta.
11 Más tarde llegaron las otras vírgenes diciendo: “¡Señor, señor,
ábrenos!”
12 Pero él respondió: “En verdad os digo que no os conozco.”
13 Velad, pues, porque no sabéis ni el día ni la hora.
14 «Es también como un hombre que, al ausentarse, llamó a sus
siervos y les encomendó su hacienda:
15 a uno dio cinco talentos, a otro dos y a otro uno, a cada cual según
su capacidad; y se ausentó.
16 Enseguida, el que había recibido cinco talentos se puso a negociar
con ellos y ganó otros cinco.
17 Igualmente el que había recibido dos ganó otros dos.
18 En cambio el que había recibido uno se fue, cavó un hoyo en tierra
y escondió el dinero de su señor.