40 Y el Rey les dirá: “En verdad os digo que cuanto hicisteis a unos
de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis.”
41 Entonces dirá también a los de su izquierda: “Apartaos de mí,
malditos, al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles.
42 Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me
disteis de beber;
43 era forastero, y no me acogisteis; estaba desnudo, y no me
vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis.”
44 Entonces dirán también éstos: “Señor, ¿cuándo te vimos
hambriento o sediento o forastero o desnudo o enfermo o en la cárcel, y no
te asistimos?”
45 Y él entonces les responderá: “En verdad os digo que cuanto
dejasteis de hacer con uno de estos más pequeños, también conmigo
dejasteis de hacerlo.”
46 E irán éstos a un castigo eterno, y los justos a una vida eterna.»