1 ¡Ay de la ciudad sanguinaria, mentira toda ella, llena de rapiña, de
incesante pillaje!
2 ¡Chasquido de látigos, estrépito de ruedas! ¡Caballos que galopan,
carros que saltan,
3 caballería que avanza, llamear de espadas, centellear de lanzas...
multitud de heridos, montones de muertos, cadáveres sin fin, cadáveres en
los que se tropieza!
4 Es por las muchas prostituciones de la prostituta, bella de gracia y
maestra en sortilegios, que vendía a las naciones con sus prostituciones y a
los pueblos con sus sortilegios.