Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Números 27, 3-14

3 «Nuestro padre murió en el desierto. No era de la facción que se
amotinó contra Yahveh, de la facción de Coré; por sus propios
pecados
murió sin tener hijos.

4 ¿Por qué ha de ser borrado de su clan el nombre de nuestro padre,
sólo por no haber tenido hijos? Danos alguna propiedad entre los hermanos
de nuestro padre.»

5 Moisés expuso su caso ante Yahveh.
6 Respondió Yahveh a Moisés:


7 «Han hablado bien las hijas de Selofjad. Dales, pues, en propiedad
una heredad entre los hermanos de su padre; traspásales a ellas la herencia
de su padre.

8 Y dirás a los israelitas: Si un hombre muere y no tiene ningún hijo,
traspasará su herencia a su hija.

9 Si tampoco tiene hija, daréis la herencia a sus hermanos.

10 Si tampoco tiene hermanos, daréis la herencia a los hermanos de su
padre.

11 Y si su padre no tenía hermanos, daréis la herencia al pariente más
próximo de su clan, el cual tomará posesión de ella. Esta será
norma de
derecho para los israelitas, según lo ordenó Yahveh a Moisés.»

12 Dijo Yahveh a Moisés: «Sube ahí a la sierra de Abarim y mira la
tierra que he dado a los israelitas.

13 Cuando la veas, irás a reunirte tú también a los tuyos, como se
reunió tu hermano Aarón.

14 Porque os rebelasteis en el desierto de Sin, cuando protestó la
comunidad y cuando os mandé manifestar delante de ella mi santidad, por
medio del agua.» Estas son las aguas de Meribá de Cadés, en el desierto de
Sin.