...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 1, 23-33
23 Convertíos por mis reprensiones: voy a derramar mi espíritu para
vosotros, os voy a comunicar mis palabras.
24 Ya que os he llamado y no habéis querido, he tendido mi mano y
nadie ha prestado atención,
25 habéis despreciado todos mis consejos, no habéis hecho caso de
mis reprensiones;
26 también yo me reiré de vuestra desgracia, me burlaré cuando llegue
vuestro espanto,
27 cuando llegue, como huracán, vuestro espanto, vuestra desgracia
sobrevenga como torbellino, cuando os alcancen la angustia y
la
tribulación.
28 Entonces me llamarán y no responderé, me buscarán y no me
hallarán.
29 Porque tuvieron odio a la ciencia y no eligieron el temor de
Yahveh,
30 no hicieron caso de mi consejo, ni admitieron de mí ninguna
reprensión;
31 comerán del fruto de su conducta, de sus propios consejos se
hartarán.
32 Su propio descarrío matará a los simples, la despreocupación
perderá a los insensatos.
33 Pero el que me escucha vivirá seguro, tranquilo, sin temor a la
desgracia.»